Las orejas pueden ponerse rojas y tiene una explicación. Seguro que conoces a alguien o te ha pasado alguna vez. No es motivo de vergüenza que tus orejas se pongan rojas, pero debes saber por qué ocurre y cómo puedes aliviar el picor y calor que desprenden.
En primer lugar, debemos distinguir entre la rojez de las orejas por situaciones que puedan ocurrirte o que las orejas se pongan rojas debido a un episodio concreto. Este último estado se conoce como el Síndrome de la Oreja Roja. Vamos a explicarte los síntomas de este síndrome y las claves para conocer mejor cómo se produce y por qué genera: calor, picazón y molestia en las orejas.
El Síndrome de la Oreja Roja
Esta patología fue acuñada por el doctor J.W. Lance en 1996 y, aunque no se tiene mucha información concreta acerca de este síndrome, el enrojecimiento de las orejas tiene su origen en la acumulación de sangre contenida en los capilares. Se desconocen también sus causas concretas, pero existen factores que influyen en su aparición. Por ejemplo: hacer deporte, comer chicle, tocarse la oreja, mover el cuello, experimentar sensaciones de calor y frío…
¿Cómo notarás entonces que puedes estar ante un signo de tener el Síndrome de la Oreja Roja?
- Picor
- Hinchazón
- Rojez
- Dolor
- Inflamación
No te alteres demasiado. Los síntomas de desarrollar este síndrome, tanto en una oreja como en las dos, suelen durar entre unos minutos hasta unas pocas horas. Para relajar la zona hasta que puedas ver a un médico, prueba a enfriar levemente, pero consulta a tu médico para buscar el tratamiento más efectivo.
¿Pero cuál es la verdadera razón de que te ardan las orejas? ¿A qué se debe este enrojecimiento?
Este fenómeno tiene una explicación física: los vasos sanguíneos se dilatan y aumenta el flujo de sangre en la oreja y, por eso, se ponen rojas como pasa con las mejillas. La temperatura aumenta, no porque haya fiebre, pero las causas que generan esta situación son:
Causas por las que las orejas se ponen rojas
- Infección de oído. Uno de los síntomas de tener otitis es el enrojecimiento de las orejas.
- Sufrir un golpe en el oído externo. La hinchazón y el calor en las orejas aparecen en este caso.
- Picadura de un insecto o perforaciones en las orejas.
- Las afecciones inflamatorias, eccemas o psoriasis pueden hacer su aparición en el oído externo y en el canal auditivo.
- Alergias como la urticaria o infecciones bacterianas.
- Quemaduras solares por la exposición al sol. Procura aplicarte siempre protección solar o cúbrete la cabeza con un sombrero o pañuelo. Y, si ya es tarde, aplica aloe vera porque suele aliviar bastante.
- Desequilibrios hormonales. Los cambios hormonales relacionados con el tiroides y las glándulas suprarrenales, además de la menopausia y el embarazo, tienen como efecto secundario la rojez de las orejas.
- Estrés y ansiedad
- Cambios bruscos de temperatura. Si exponemos nuestras orejas al calor, el cuerpo presenta vasodilatación y se refleja en el aspecto de las orejas. Si exponemos las orejas al frío, la vasodilatación será inducida y notaremos nuestras orejas arder. En el caso de la exposición a temperaturas gélidas, el cuerpo reacciona calentando las orejas para evitar la congelación.
También existen otros motivos curiosos que hacen arden las orejas:
- Ataques de ira, enfado o nervios
- Situaciones de vergüenza o embarazosas
- Emociones intensas
- Concentración máxima
Cuidados para bajar el picor y la hinchazón de las orejas
Estos episodios en los que tienes la sensación de que te arden las orejas no suelen durar dos días y se tratan con la aplicación de frío local o fármacos, siempre recetados por tu médico, para aliviar los síntomas de calor.
Como expertos en el cuidado de la audición, te damos un consejo a guardar para siempre: acude siempre al especialista que corresponda y nunca te automediques. Los médicos están para ayudarte y nosotros para resolverte todas las dudas que puedan guardar relación con tu oído.