El martillo del oído
Junto al yunque y al estribo el martillo forma la cadena de huesecillos del oído, sin la que sería imposible la audición.
Este hueso, que se encuentra conectado con la membrana timpánica o tímpano, se encarga de transmitir al oído interno las ondas sonoras que llegan por el aire.
Las vibraciones llegan primero al yunque mediante la articulación incudomalear y a continuación al estribo, hueso con el que comunica el yunque y que está conectado a la membrana oval.
Por tanto, este es el recorrido de las ondas sonoras en la cadena de huesecillos del oído: primero hacen vibrar al tímpano y luego mueven el martillo, que a su vez desplaza al yunque y al estribo.